Ocho años, si: Ocho largos y tortuosos años lleva el representante Eduardo Agatón Diazgranados, miembro de otra de las familias tradicionales de Santa Marta que ha gobernado a la ciudad por siglos, tratando de llevar de nuevo al poder de la Alcaldía a su familia, pero no ha podido, porque en su desespero por lograrlo ha cometido muchos errores que en lugar de favorecerlo lo han perjudicado.
Inicialmente comenzó su tectónica tarea con un “pollo” que creyó tendría el mismo efecto que ese “pupilo” consiguió cuando fue alcalde de la vecina ciudad de Barranquilla. Si, estamos hablando del neurocirujano Humberto Caiaffa, el samario que venía de ser alcalde de Barranquilla.
Aún se recuerda aquella foto que se hizo tomar cuando llevó a su candidato a registrarse en la Registraduría, en donde se hicieron acompañar con el astro del fútbol colombiano Carlos El Pibe Valderrama. Para el entonces, en el año 2012, al Pibe aún le creían por cuanto el crack samario no se movía todavía en el marketing en el que hoy se desenvuelve como su segundo hábitat después de acumular fama en el fútbol.
No obstante, con el Pibe y todo, Carlos Caicedo les ganó en las votaciones muy lejos, demostrándoles que los votos se consiguen en los barrios populares y sectores de la ciudad, acercándosele a la gente, hablándole con sinceridad y realidades y sin mentiras ni cinismo. Al mismo tiempo que puso al descubierto que los ídolos solo son eso, ídolos y no ponen casi nada en las urnas.
Posteriormente, cuando Caicedo lanzó a Rafael Martínez, sucedió lo mismo y el ex representante a la Cámara se unió a otros para apoyar a un joven aspirante en el que vieron, ahora sí, al verdadero pollo que le iba a dar pelea al gallo del líder de Fuerza Ciudadana, pero no tuvieron en cuenta la verdadera fuerza del movimiento del exalcalde Caicedo y volvieron a ser derrotados en franca lid o de la forma correcta, democráticamente.
Era inaudito que ni siquiera unidos ni con la colaboración del crack de Colombia habían podido vencer al caicedismo y por eso para la contienda política que se avecina tuvieron que recurrir a otras maneras pocas ortodoxas, pero que en la política colombiana es costumbre y tradicional.
Sin embargo, siguen cometiendo los mismos errores y por su afán o desespero vuelven y cometen los mismos desaciertos que terminan devolviéndoseles como búmerang. De ahí que para las próximas elecciones del 27 de octubre, la percepción sobre quién va a ser elegido alcalde de Santa Marta, sigue favoreciendo a la pupila de Caicedo, Virna Jhonson, quien no solo parece mantener el 58 por ciento de una última encuesta seria y responsable, sino que también ha demostrado un aumento considerable, mientras que los otros tres candidatos al mismo cargo se han rezagado todavía más.
Caso parecido viene aconteciendo en la contienda electoral para escoger a quien será el Gobernador del Magdalena a partir del año 2020. Aunque allí son también cuatro los candidatos, sin duda los dos que más están en rifirrafe, quiñando o en una reñida competencia, son el propio Carlos Caicedo, el líder de Fuerza Ciudadana y Luis Miguel “el Mello” Cotes, quien como los candidatos derrotados en las dos últimas elecciones, también ha obtenido el apoyo de las demás familias tradicionales de la ciudad y el Departamento e incluso del exrepresentante Eduardo Agatón Diazgranados y del Pibe Valderrama.
