Alerta por escasez de sedantes requeridos para pacientes con coronavirus.

Por: Jorge Soto Daza

La atención de los pacientes en las UCI afronta una nueva dificultad, se trata de la escasez de algunos sedantes y relajantes muculares cerebrales, para intubar a los pacientes contagiados con coronavirus.

El uso de estos sedantes en personas positivas para covid-19 se ha multiplicado cuatro veces más desde que inició la pandemia, motivo por el que, especialistas y el Gobierno Nacional ya buscan alternativas para evitar el desabastecimiento.

El 17 de julio las agremiaciones médicas de intensivistas, anestesiólogos, cuidados paliativos y estudios del dolor, le advirtieron al Ministerio de Salud, al Fondo Nacional de Estupefacientes y al Invima, del desabastecimiento de sedantes y analgésicos relajantes neuromusculares, que estaba desencadenando la pandemia.

“Este desabastecimiento tiene impacto negativo en la atención a los pacientes con infección por covid-19que requieren UCI u hospitalización, así como en el control de síntomas y calidad de vida de pacientes con enfermedades crónicas avanzadas, como el cáncer o la falla cardiaca, lo que puede generar aumento en la carga de enfermedad y uso de servicio de urgencias”, señala la misiva dirigida a la cartera de Salud.

La advertencia se hizo realidad en varias ciudades. “El fentanilo, que es analgésico potente y el cizatracurio, un relajante neuromuscular, ya era difícil conseguirlo y se había agotado en algunas instituciones”, explico José Luis Accini, miembro de la Asociación de Medicina Crítica y Cuidado Intensivo

Esto se explica, porque el uso de estos medicamentos se multiplicó. “El fentanilo es un medicamento que se requería, más o menos, entre cuatro; seis y ocho ampollas por día de paciente que estuviera en la UCI en ventilación mecánica. En este momento un paciente de estos puede requerir 20 ampollas al día”, detalló Leonardo Arregocés, director de medicamentos y tecnologías del Ministerio de Salud.

El Invima ya declaró 18 de estos medicamentos como mínimos vitales disponibles para exonerar del trámite de registro sanitario la importación y producción, por su parte, el Ministerio trabaja con la industria para analizar sus capacidades.

“Mirar cuál es la capacidad de la industria nacional de producir lo suficiente para suplir la demanda, y en caso de que no se pueda, pues hacer importaciones de lo que haga falta”, añadió Leonardo Arregocés.

Para sobrellevar la escasez, los especialistas impartieron instrucciones médicas sobre alternativas y uso óptimo de los medicamentos existentes. Así como los reactivos de pruebas de laboratorios y los ventiladores mecánicos, estos medicamentos escasean en el mundo.