Colombia

Duras críticas al presidente Duque

Le prestó plata a Avianca y no a las miles de pequeñas y medianas empresas quebradas por la pandemia

Por Álvaro Cotes C.

Mientras el Gobierno nacional salía al rescate de la empresa Avianca, una compañía que ya no es de colombianos, destinándole la bobadita de 370 millones de dólares, miles de propietarios de pequeñas y medianas empresas que están también quebradas por la misma pandemia, se sintieron como hijos de menos madres, porque en cambio a ellos el Presidente ni siquiera les ha enviado ningún salvavida.

Igual se encuentran unos 7 millones de desempleados, las enfermeras y médicos que siguen muriendo sin ningún apoyo estatal y con sueldos atrasados, pese a estar al frente de la injusta guerra que libran contra el coronavirus y en la que han tenido muchas bajas.

“Es muy cruel ver que un gobernante al cual elegimos para que nos representara y administrara el dinero público con beneficios para todos, solo lo haga con una empresa privada que ya ni siquiera es colombiana, como lo es Avianca”, dijo un pequeño comerciante que no ha podido abrir su restaurante durante más de cinco meses por la pandemia.

“Es muy triste y vergonzoso tener que sufrir por un gobernante que no piensa en el pueblo sino en beneficiar a su grupo político y a los amigos de su mentor Álvaro Uribe Vélez, hoy con detención domiciliaria por fraude procesal y soborno”, recalcó otro empresario dueño de una fábrica de comestible.

El resentimiento en Colombia por las injusticias del Gobierno hacia la gente de clase media para abajo es general, por cuanto ven cada vez más que el abismo entre el pueblo y su gobernante se amplía o se aleja de las necesidades reales que debería remediar antes que ayudar a los más ricos.

Pero las críticas al presidente Iván Duque no solamente nacen de los menos favorecidos o pobres ni siquiera de los de la clase media, también provienen de los dirigentes y políticos más influyentes que hacen parte de movimientos alternativos, de izquierda o de algunos gremios neutros como periodistas, entre otros más.

La situación en el país se hace cada día más inestable, no solo por el recrudecimiento de las masacres, las cuales van 30 en el presente año, sino también por las absurdas, cómicas y hasta increíbles medidas y posiciones que toma el Presidente de forma descarada frente a todo el pueblo y sin ningún recato de vergüenza tanto a nivel nacional como internacional.

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