La representante de las Naciones Unidas se pronunció en el marco de la condecoración realizada en el Senado a las madres de los jóvenes de Soacha víctimas de los falsos positivos.
Juliette de Rivero, representante de la ONU para los derechos humanos en Colombia, exigió al Estado colombiano diligencia y compromiso en las investigaciones sobre ejecuciones extrajudiciales por parte de miembros de la fuerza pública durante el conflicto armado, recordando que desde 1998 la ONU comenzó a reportar esta situación.
“Negar lo que ocurrió o intentar minimizar su amplitud es socavar la rendición de cuentas y la búsqueda de la verdad, el esclarecimiento completo y la sanción de los máximos responsables, fomentarán la consolidación de la paz, el Estado de Derecho y la democracia”, declaró.
De la misma manera solicitó respeto por la autonomía de la JEP entregándole su respaldo para que avance con las investigaciones sobre las ejecuciones extrajudiciales y mostrando su apoyo a las víctimas, principalmente a las madres condecoradas.
“Muchas de sus denuncias fueron negadas, archivadas o mal tramitadas. Debido a su lucha contra la impunidad, ustedes y sus familias también han sido víctimas de agresiones y de estigmatización. Esto no sólo ha afectado su vida, sino que los efectos de estas agresiones se han extendido a la comunidad y al ámbito público”, expresó la representante de la ONU.
Para las madres, el acto de reconocimiento y el respaldo de Naciones Unidas representan un gran impulso a su lucha.
