La práctica del “periodismo paracaída” es una actividad cada vez más usual en Colombia y suele ser realizada muchas veces por políticos que, además de poseer una, dos y hasta tres profesiones diferentes, se dedican a ejercer ese “periodismo” como medio de expresar su resentimiento, luego de haber recibido una derrota políticamente.
Aunque es una modalidad que han querido adoptar últimamente los políticos, no obstante, se venía haciendo desde hace rato por parte de oportunistas que, pese a tener otras profesiones, prefirieron entrar a alguna emisora, escribir en un portal o fundar un medio de comunicación digital y aprovechar para hacerse a unos jugosos contratos publicitarios de gobiernos amigos de turnos.
Sin duda esos no son periodistas de verdad sino oportunistas que buscan sobrevivir en el medio y para lo cual aprovechan la corrupción campante e impune que con mucha frecuencia traen en sus genes los gobiernos de la derecha y ultraderecha en los territorios olvidados del Estado.
Olvidados para las obras mas no para recibir los legales y millonarios subsidios nacionales que casi nunca llegan a ser invertidos sino repartidos como queso o pastel de cumpleaños con tajadas para todos los amigos e incluso para esos “periodistas paracaídas”.
Y es que, mientras al periodismo se le siga viendo como un oficio y no como una profesión, pese a que desde mucho rato existen las facultades de Comunicación Social que se crearon en las universidades con el propósito de que, para llegar a ser periodista se debe estudiar, puesto que se trata de un profesional de las comunicaciones con responsabilidad y para lo cual debe aprender no solamente a comunicar responsablemente, sino también a escribir bien y conocer y diferenciar las técnicas o formas de hacer periodismo que difícilmente se aprenden sin estudiar, porque de esa manera se aprende cómo hacer una crónica, un reportaje y cómo en una entrevista el entrevistador no debe ser el protagonista sino el entrevistado.
No obstante, todo eso parece que hoy en día no importa y por eso al periodismo ha llegado gente que cree que, con solamente hablar coherentemente frente a un micrófono o escribir semanalmente en un portal, ya son periodistas e incluso les ponen a sus vehículos la palabra “prensa” y mandan hacer un carnet que los identifique como periodista o dueño del medio donde habla o escriba.
Ya con eso se “gradúan” de “periodistas”, lo que no es correcto, pues el periodismo no es escribir o hablar solo sobre sus intereses oportunistas, por el contrario, el periodista debe hablar o escribir siempre en busca de la verdad e informar los hechos como son, no manipularlos ni buscando beneficios particulares y sobre todo, insisto, debe saber diferenciar y tener la habilidad de practicar los géneros periodísticos, de lo contrario puede ser confundido con uno de esos “periodistas paracaídas” de hoy en día.
Por Álvaro Cotes C.
