El Gobierno Nacional debe atender la emergencia que se vive en Salamina

En Salamina, si no es el aumento del caudal del río Magdalena, ahora se presenta otro fenómeno y es la sedimentación del río Magdalena, lo que está haciendo que proliferen los bancos de arena por la zona.

Esta situación ya trajo la primera consecuencia: la incomunicación de Salamina con el departamento del Atlántico.

“No se puede trabajar más ahí porque el islote tiene toda la zona abonada y es imposible la operación del ferry. Para poder trasladarse hasta Barranquilla hay que tomar la vía de Remolino – Sitionuevo, conocida Vía de la Prosperidad, que está en pésimo estado. Y digamos que eso dificulta la movilidad, afectando a los vehículos”, ha dicho el personero de esa población, Carlos de la Cruz.

Los esfuerzos del gobierno departamental encabezado por Carlos Caicedo han sido importantes para mitigar los efectos de la erosión fluvial, pero en el caso de la sedimentación se requiere un mayor apoyo. Y este solo úede venir del Gobierno Nacional.

Sumado a los problemas que genera la malograda Vía de la Prosperidad dejada por la familia Cotes como ejemplo de la negligencia y el abandono que estos pueblos han sufrido de la mano de la politiquería tradicional.

El llamado es claro al Gobierno Nacional que lidera Gustavo Petro: a centrar su mirada hacia ese sector del departamento.